La mayoría
de los dueños de gatos les dan algo de comer fuera del horario de comidas,
puede ser algo para roer o restos de comida de humanos y consideran este gesto
como una muestra de afecto hacia el animal. Pero la alimentación de los
humanos, aunque es rica en calorías, es pobre en los principales elementos
nutritivos que necesita tu gato, con el consiguiente riesgo de sobrealimentarlo
y desequilibrar su nutrición.
Por norma
general, las golosinas que ofrecen los establecimientos son la opción más sana
de todas: están concebidas especialmente para ser muy sabrosas y para completar
las comidas principales. Además por su propia composición, ayudan a mantener
una buena higiene dental y facilitan la digestión de tu compañero de cuatro
patas, sin provocarle desequilibrios nutricionales.
Si le das
golosinas a tu gato, ten en cuenta que debes reducir proporcionalmente el
aporte calórico de su comida principal, y respetando siempre las instrucciones
del fabricante.
Tipos de golosinas y snacks
Recompensas ofrecidas en la
mano
Aunque las
recompensas, en forma de alimento, que damos a los gatos no tienen el mismo
significado que con los perros, las golosinas dadas como recompensa refuerzan
los lazos con tu gato. El mercado te ofrece un surtido de golosinas con sabor a
carne, pensadas especialmente para el fino paladar de tu gato pero si alterar
su equilibrio nutricional básico.
Snacks crujientes depositados
en el comedero
Los snacks
crujientes son un complemento a la alimentación en lata o en seco y se ofrecen
para mejorar el gusto de la comida.
Snacks para roer que favorecen
la masticación y unos dientes limpios
Una gran
cantidad de snacks disponibles en el mercado ofrecen la ventaja adicional de
contribuir a la higiene dental de tu gato, reduciendo la formación de placa
dental y de sarro.
Leche para gatos
Se suele
decir que a los gatos les gusta la leche, pero en realidad su sistema digestivo
no está concebido para transformar la lactosa de la leche. La leche especial
para gatos contiene poca lactosa y permite evitar los problemas digestivos que
podrían aparecer si el gato bebiera leche de vaca.
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